Bienvenido a una nueva edición de los Ferconsejos de Ferjuca.com, en el cual te traemos otro proyecto interesante y ecológico para tu hogar.
Los corchos de las botellas de vino puede servirnos como un material perfecto para su reutilización, porque que son biodegradables, naturales y renovables. Entre las cosas que podemos hacer con ellos, está esta alfombra de baño, hecha con unos 200 corchos reciclados.
Necesitarás unos 200 corchos, una pistola de silicon, y un soporte para usarlo de plataforma sobre la que irán pegados los corchos.
1. Preparando los corchos. Se cortan los corchos longitudinalmente en mitadas, sobre una tabla de cortar. Utiliza un cúter o cuchillo afilado y ten cuidado de no cortarte. Si algún corte te quedase irregular, utiliza una lija para igualarlo.
2. Componer la silueta de la alfombra. Ve colocando los corchos boca abajo, conformando un rectángulo. Utiliza una regla para nivelar y procurar que el rectángulo sea lo más recto posible.
3. Mide y corta el material que utilizarás como revestimiento para la alfombra a medida con un cuter circular, una regla y de apoyo para cortar.
4. Comenzar el montaje de la alfombra disponiendo en primer lugar los corchos que forman el contorno de la alfombra, como puedes ver en la siguiente foto. Para fijar cada corcho a la plataforma, aplicaremos una línea de silicon en la parte plana de cada corcho, con la pistola de silicon. Comprueba que alineas el corcho al borde de la plataforma con precisión, y presiona fuerte el corcho. Limpia cualquier goteo de silicon antes de que se endurezca totalmente, pero después de que se enfríe (para no quemarte).
5. Una vez que está hecho el marco... iremos trasladando el resto de los corchos a su posición. Probablemente tendrás que intercambiar algún corcho por otro para que se ajuste correctamente a su posición. Y ya está listo, ya tienes tu alfombra para el baño, a medida y ecológica.
Así que no olvides guardar los corchos para poder reutilizarlos después en algún proyecto d casero.
¿Qué es exactamente el corcho?
El corcho precede del árbol del alcornoque. A medida que la corteza va cogiendo grosor, puede retirarse del árbol sin dañarlo, ya que dicha corteza se regenera. Así, el corcho se puede cosechar cada 10 a 12 años. En Portugal (el mayor país productor de corchos del mundo) los alcornocales están protegidos y no pueden ser talados. Se producen alrededor de 13 mil millones corchos naturales del vino cada año.
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